Reconquistemos Valentia

 Publicado en Las Provincias el 9 de Octubre de 2016

»¿Cuándo fue la última vez que te sentiste orgulloso de ser valenciano?» . Escuché esta frase en una campaña institucional de la Generalitat y pensé: nunca he dejado de estar orgulloso.  Es verdad que los últimos tiempos han sido duros. La crisis económica y el virus de la corrupción han golpeado con fuerza y la clase política no ha estado a la altura de un pueblo, muchas veces difamado y vapuleado, pero que se niega a agachar la cabeza.

Nuestra historia avala ese espíritu emprendedor y combativo. Los romanos bautizaron nuestra ciudad con el nombre de Valentia Edetanorum (del latín valentía, valor y Edetanorum, en la región de Edetania). Valor, energía y voluntad para afrontar situaciones difíciles que demostramos resistiendo  los años de dominación musulmana sin perder la esencia. Cuando Jaume I, nuestro rey conquistador, entró con sus tropas en la ciudad, Valencia se ganó a sí misma. Recuperó sus leyes, els Furs, sus símbolos y su identidad sin dejar perder algunas pinceladas de la cultura y las costumbres musulmanas que enriquecen desde entonces nuestro ADN. Así somos los valencianos: valientes, capaces de resistir los envites de la vida y salir reforzados.

Quizá hoy necesitamos la llegada, aunque sea metafórica, de un nuevo Jaume I. Un revulsivo que nos ayude a desprendernos de esa  imagen de corrupción y “meninfotisme”.  La reconquista supuso años de cruenta batalla y de muchas pérdidas. También ahora lloramos bajas muy importantes: las entidades financieras valencianas, nuestra televisión pública y hasta nuestro Valencia club de fútbol. Cayeron víctimas de sus propios gestores, de los que tenían que trabajar por su solvencia y su buen hacer. Pero no son irrecuperables. Solo hace falta voluntad social,  política, coraje moral  y acción.

Se acabó el tiempo de los lamentos, es el tiempo de conquistar nuestros miedos y recuperar nuestro orgullo. Miguel Hernández  escribió : “Quien se para a llorar, quien se lamenta contra la piedra hostil del desaliento, quien se pone a otra cosa que no sea el combate, no será un vencedor, será un vencido lento” . Ha llegado el momento de mostrar nuestra valentía.  Reivindicar y poner en valor  a esos empresarios que han tejido con pequeñas empresas una economía solvente que da trabajo y exporta marca valenciana. A esos agricultores que desafían todas las leyes del mercado y siguen trabajando la tierra, cultivando nuestros productos. A los científicos que, a pesar de los recortes, siguen investigando y consiguen mejorar la calidad de vida de todos e, incluso, consiguen que su nombre esté entre los candidatos al Nobel de Medicina o de Química. A los jueces libres e independientes ajenos a la influencia mediática y a la atmósfera tóxica que oscurece nuestra tierra. A los autónomos que, a pesar de la crisis y los impuestos, levantan cada día la persiana de su negocio. A los padres y maestros que, sin perder de vista un mundo global,  transmiten a las nuevas generaciones la importancia de nuestras raíces, de nuestra lengua, de nuestras señas de identidad. Y , en definitiva, reivindicar los valores de nuestro pueblo,  un pueblo valiente que espera, necesita y lucha por una nueva reconquista. Ya Séneca dejo dicho: “ No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos hacerlas”.

¡Reconquistemos Valentia!.

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