Pilar de la Fuente Rubio

Socia Profesional

Especialista en el área de Derecho Matrimonial, de Familia y Sucesiones.
Se incorporó al despacho en el año 1996.

Abogada Experta en Derecho de Familia, Herencias y Sucesiones. Socia Profesional de Domingo Monforte Abogados Asociados desde 1996. Más de 25 años de experiencia en la resolución de conflictos de derecho matrimonial y derecho sucesorio.

Equipo Jurídico ·

Sobre mí

«Quien no entiende una mirada, tampoco entenderá una larga explicación».

Háblenos de sus comienzos y su trayectoria profesional

Nada más terminar la universidad y la práctica jurídica comencé a ejercer, ya que tras unos pocos meses de pasantía me incorporé al Despacho. Recuerdo que el primer día ya tenía sobre la mesa 3 expedientes, 2 de ellos de familia, por lo que desde el principio me inicié en mi especialidad. Desde mi incorporación al despacho en 1996 hasta el 2005 la dedicación a la abogacía fue plena. A partir de dicho año compaginé la labor profesional con la dedicación a la empresa familiar de mobiliario. Creo por tanto que tanto mis estudios como mi trayectoria profesional tiene mucho que ver con la vinculación, por un lado, al mundo empresarial que siempre se ha vivido en mi familia, y por otro mi clara vocación al derecho, dirigido a la familia y personas, por el lado humano que conlleva.

Más de 15 años unida a un proyecto en el despacho, ¿qué valoración nos hace?

Llevo mucho tiempo unida al proyecto y valores del despacho porque comparto los principios que lo inspiran como son el trabajo, el respeto al cliente, el respeto a los compañeros, la dedicación, el estudio y la honestidad. El ejercicio de la abogacía puede ser igual de apasionante, pero no está exento de sinsabores, por lo que el apoyo de un equipo unido como lo es el de mi despacho es fundamental. Yo lo sentí desde el primer día que me incorporé.

Háblenos de su especialidad el derecho matrimonial, en el momento social y legislativo actual.

La verdad es que el derecho matrimonial ha sufrido un cambio grandísimo desde mis inicios, y no ya sólo en el número de leyes cada vez más amplio que lo regula tanto a nivel foral como estatal e internacional, sino en la evolución social, ideas y compromisos que la sociedad va adquiriendo y por las que se luchan, que sin duda va modificando la tendencia de los tribunales. Observo también que ese cambio social hace que las pretensiones en los tribunales por parte de los padres sean cada día más exigentes, y menos conformistas que antes, es decir, que se lucha más por los derechos que las leyes van reconociendo, un claro ejemplo es la custodia compartida.

¿Qué beneficios tiene para las parejas regular, en momentos de equilibrio afectivo, tanto los efectos personales como los patrimoniales, mediante pactos preventivos matrimoniales o prematrimoniales?

Desde el despacho entendemos, que estos pactos logrados en un momento de equilibrio afectivo permiten buscar la mejor solución en adecuado equilibrio con los intereses familiares. Al abordar estas cuestiones en el momento de la ruptura estos atributos se pierden, al convertirse en un enfrentamiento entre los padres. Contrariamente, y como he dicho, si los pactos se realizan en un momento de estabilidad de la pareja, si al producirse la ruptura las circunstancias son similares a las tenidas en cuenta al realizar los pactos, la aplicación de los mismos les garantizará una solución civilizada, acorde y solidaria familiarmente. Igualmente estimamos que son vinculantes para los tribunales, si persisten circunstancias iguales.

En su ponencia ha valorado la Sentencia nº 359/2013 de TS, Sala 1ª de lo Civil de 24 de mayo de 2013, ¿por qué la ha elegido?

La he elegido por un lado porque me parece que refleja ese gran cambio y evolución del derecho de familia del que antes hemos hablado, pues otorga un régimen de visitas a unos abuelos que tiene malas relaciones con los padres de la menor, constante el matrimonio de los progenitores, y por otro porque el TS se adelanta proponiendo las posibles soluciones a los problemas que pueda suponer la ejecución de la sentencia, y todo ello sin perder de vista el interés de la menor.

Háblenos de usted fuera del ámbito profesional.

Soy muy familiar, por lo que mi tiempo libre lo disfruto con mi marido y mis dos hijas, de 10 y 5 años. Además mis padres, hermanos y sobrinos son para mí un apoyo muy grande, por lo que también paso gran parte de mi tiempo libre con ellos, pues estamos muy unidos. Y luego están mis amigos, con quienes no pierdo el contacto aunque sea de modo “on line”. Me encanta leer, la música, tener conversaciones con las personas que aprecio y de las que siempre aprendo, bailar, y disfruto muchísimo con las comidas de amigas en las que somos capaces de hablar todas a la vez para contarnos todo lo que nos ha pasado desde la anterior comida.